Es bastante interesante el ir recogiendo las opiniones de la gente de la calle sobre los debates que hacen los políticos desde lugares públicos y los medios de comunicación. Esto es mucho más importante cuando tratamos el tema de la integración social de inmigrantes porque el lugar en donde esta se produce es precisamente allí. En las casas, en la calle, en las escuelas, en los centros públicos, en los centros de trabajo es donde se desenvuelve la vida real que siempre es variada y múltiple.
Es la convivencia del día a día en donde se desenvuelve la autentica interculturalidad y observarla y vivirla suele ser un ejercicio bastante más interesante que analizar los discursos que se hacen en las tribunas públicas sobre ella.
Alemania es la locomotora de Europa y hasta ahora ha necesitado de muchos trabajadores extranjeros para hacer lo que ha estado haciendo. Va a seguir continuando haciendolo pero de otra forma, se han adaptado siempre a las circunstancias cambiantes de la economía desde el final de la II Guerra Mundial y no será esta la primera crisis que superar. Lo que sucede de nuevo en este aspecto es que ya hay inmigrantes de 3ª generación en suelo alemán que como ha dicho Merkel: "no se van a ir", sea esto bueno o malo es la realidad.
Asumir que "los otros" tal y como reza el titulo de uno de mis blogs: Llegaron para quedarse que es lo que en definitiva supone el modelo intercultural, no es en principio un mal paso. Pero como todos los pasos importantes son algo peligroso porque los pasos en si mismos no suponen apenas nada pero llevan implícitos una voluntad de ir hacia algún sitio y unas capacidades de hacerlo.
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